9 sept 2010

EDICIÓN Nº 30 JULIO-AGOSTO 2010

Diluvio
Escritora puntana - doloresvalentino@hotmail.com
El diluvio comenzó en una noche estéril.
Cuando en la esquina del estrecho callejón
se apiñaban las hojas tristes.
Donde la tierra albergó las gotas que se escapaban
de la faz helada del invierno.
Mientras los tordos, hacían duelo cuando en los rosales,
las rosas se morían.
Y el aire congelaba los pétalos caídos.
Y el viento trizaba las hojas secas.
El diluvio..., inundaba la árida garganta del débil portal
donde se posaba el zorzal.
Mientras las sombras comulgaban con la ciega oscuridad.
Entonces el miedo, oprimió al corazón compungido que latía.
En el pequeño pecho del pájaro, recién nacido.