23 oct 2009

EDICION Nº 18 - 2008

Carta para San Luis

San Luis, te escribo esta carta desde lo más profundo de mi corazón…, corazón que con sus alas sale a volar por donde el sol ilumina a los árboles que se van despidiendo del verano, y sus hojas amarillas forman un collage en el lugar; mientras que las estrellas se esconden en tus lagos mansos y la luna corta retazos de blancura sobre la montaña.
Tus calles…, guardaron el perfume de los jazmines que por las siestas salía de paseo en una suave brisa, y hoy tiñe de color azul a mis recuerdos.San Luis, por tus ríos mansos corres, saltando entre las piedras, llevándole mensajes a los gorriones y recostándote en las orillas donde descansas; y hoy… San Luis, quiero contarte que el tiempo me trasladó hasta aquí: Juana Koslay, y te cuento que encontré un lugar soñado…, donde el arrullo de las palomas me consuela, y el verde follaje del paisaje reverdece en cada primavera. Mientras el otoño juega con sus colores, los trinos de los pájaros sobrevuelan este espacio tranquilo.
Donde el viento ha enterrado su corona, para soplar con fuerza por todos tus lugares.Donde la rosa puede morir, abrazando su fragancia.
Donde los niños pueden jugar con sus corazones, y los hombres pueden enterrar sus añoranzas.
San Luis, mi corazón hizo nido en tu tierra, donde la calandria por las mañanas despierta a la aurora cuyana, que duerme en tus brazos.
Donde el cielo se cuela entre las copas de los árboles y el limonero, con el aroma de sus azahares, embriaga a tus tardecitas soleadas.
Donde se escucha una tonada que viene desde el viejo callejón, que una guitarra murmura cuando la noche es oscura.
Donde en tus días y noches guardaste a mi infancia en la pequeña corola de las violetas, y hoy se escapa para que pueda escribirte como adulta desde mi corazón.
Me despido diciéndote: San Luis querido, que un 25 de agosto nacía esa pequeña puntana que aquí escribe y te regala este puñado de sentimientos perfumados de rosas para que, como mariposas sueltas, bailen en este aire serrano.
Por último te digo que, sos la cuna donde se mesen mis años y también serás la cuna que mecerá mi sueño…Sueño que volará en tu viento, que correrá en tus ríos y por todos tus lugares; sueño que dormirá en la rosa, en el jazmín y en las violetas.
¡San Luis… San Luis… tierra mía!